Durante los últimos años, el arte corporal se volvió popular, y es raro caminar por la calle, ir al supermercado o mirar televisión sin ver a alguien que tenga alguna perforación (piercing) o un tatuaje. Es común ver personas con perforaciones, ya sea en las orejas, los labios, las fosas nasales, el ombligo, la lengua o incluso las mejillas. Algunas tienen varias perforaciones.
¿Qué es la perforación del cuerpo?
Una perforación del cuerpo es exactamente eso: una perforación o un pinchazo realizado en el cuerpo con una aguja. Después, se coloca una alhaja en la perforación. Las partes del cuerpo que se perforan con más frecuencia son las orejas, las fosas nasales y el ombligo.
Recomendaciones:
â€Â¢ En caso de ser menor de 18 años, investigar si se requiere el consentimiento de los padres (en algunos lugares lo exigen).
â€Â¢ Conocer los riesgos y de que manera es posible protegerse de las infecciones y que hacer en caso de complicaciones. Algunos lugares del cuerpo pueden provocar más problemas que otros; una complicación común de las perforaciones en la nariz y la boca son las infecciones, ya que en esas zonas viven millones de bacterias. Con el paso del tiempo, las perforaciones en la lengua pueden dañar los dientes. Y las perforaciones en la lengua, las mejillas y los labios pueden traerte problemas con las encías.
â€Â¢ Los estudios han demostrado que la gente con ciertos tipos de enfermedades cardíacas puede presentar un mayor riesgo de desarrollar una infección cardiaca después de una perforación en el cuerpo.
â€Â¢ En caso de tener algún problema de salud, como alergias, diabetes, afecciones de la piel, una enfermedad que afecta tu sistema inmune o infecciones (o estar en embarazo)), es importante por preguntarle al médico que recomendaciones adicionales se deben tener en cuenta.
â€Â¢ No es buena idea que te hagas una perforación si hay tendencia a formar queloides (un crecimiento excesivo de tejido cicatrizal en el área de la herida).
â€Â¢ Estar al día con todas las vacunas (en especial, con las de hepatitis y tétanos).
â€Â¢ Asegurarse de que el lugar donde se realiza la perforación sea seguro e higiénico
Procedimiento
Si la persona que realiza la perforación proporciona un ambiente seguro, limpio y profesional, este sería un procedimiento normal:
â€Â¢ Se limpia la zona elegida a perforar (salvo la lengua) con un jabón germicida (un jabón que mata bacterias y microorganismos que provocan enfermedades).
â€Â¢ Después, se perfora la piel con una aguja limpia muy afilada.
â€Â¢ La alhaja, que ya fue esterilizada, se coloca en esa zona.
â€Â¢ La persona que realiza la perforación desecha la aguja en un recipiente especial para que no existan riesgos de que otra persona entre en contacto con la aguja o la sangre.
â€Â¢ Se limpia la zona perforada.
â€Â¢ La persona que llevó a cabo la perforación verifica y ajusta la alhaja.
â€Â¢ La persona que realiza la perforación da instrucciones sobre cómo asegurarse de que la nueva perforación se cure correctamente y qué hacer si surge algún inconveniente.
â€Â¢ Asegurarse de que el lugar donde se realiza la perforación sea seguro e higiénico.
â€Â¢ Que el lugar esté limpio
â€Â¢ Que la persona que realiza la perforación se lave las manos con un jabón germicida
â€Â¢ Que la persona que realiza la perforación use guantes desechables (como los que se usan en los consultorios médicos)
â€Â¢ Que la persona que realiza la perforación utilice instrumental desechable o esterilizado
â€Â¢ Que la persona que realiza la perforación no utilice una pistola perforadora (no se pueden esterilizar)
â€Â¢ Que la aguja que utilice sea nueva y esté siendo usada por primera vez
â€Â¢ Que la aguja sea desechada en un recipiente especial sellado después de la perforación
â€Â¢ Que existan procedimientos para el manejo y desecho adecuados de desperdicios (como las agujas o las gasas con sangre)
Fuente: kidshealth.org
