En las manos y la mente de cada mujer está la prevención.

 
 

“El mito se alimenta tanto del silencio como de las palabras", decía Italo Calvino, en EPS SURA te entregamos toda la información para que este no sea tu caso frente a uno de los cánceres más comunes, el de seno:

Mito: Quienes no tengan antecedentes familiares están libres de este cáncer.
Realidad: Este es un mito muy peligroso porque muchas mujeres lo creen y se descuidan. Un diagnóstico oportuno incrementa las posibilidades de encontrar un tratamiento efectivo.

Mito: Las mujeres jóvenes están libres de esta enfermedad.
Realidad: Este cáncer es más común en mujeres mayores de 50 años, pero eso no significa que las jóvenes no sean propensas. Recuerda que te debes practicar el autoexamen desde los 20 años, una vez al mes y consultar al médico anual para el exámenes clínico.

 
 

Mito: Es imposible evitar el cáncer de mama.
Realidad: Esto no es del todo cierto. Aunque nada garantiza disminuir a cero el riesgo de padecerlo, los hábitos de vida saludable y una buena alimentación pueden hacer la diferencia. Tener un peso adecuado, una dieta baja en grasas que incluya frutas, vegetales y granos enteros, ejercicio regular y no abusar del alcohol ayudan a mejorar el sistema inmunológico y le reducen posibilidades a la enfermedad. El autoexamen, el examen clínico y las ayudas diagnosticas son necesarias  son claves.

 

Mito: Esta es una enfermedad mortal.
Realidad: No tiene que ser así. Muchas mujeres viven muchos años de forma sana, luego de descubrir y tratar la enfermedad. El diagnóstico temprano es la mayor esperanza.

Mito: Cualquier bulto en el seno es signo de cáncer.
Realidad: El 98% de los nódulos palpados en los senos son benignos o no cancerosos. Con frecuencia son variaciones normales en el tejido. Eso sí, ante cualquier cambio hay que consultar a tu médico de familia. El miedo es uno de los aliados del cáncer.

Mito: Las mujeres de senos pequeños tienen menos probabilidades de sufrir la enfermedad.
Realidad: El tamaño de las mamas no tiene relación con las posibilidades de sufrir cáncer de seno.

Mito: Aunque las mamografías y ecografías ayudan a detectar los tumores, el exceso de radiaciones puede producir  cáncer.
Realidad: En estos exámenes se usan dosis mínimas de radiación sobre los senos, por lo que el riesgo de daño es prácticamente nulo.

Mito: Las pastillas anticonceptivas y los desodorantes antitranspirantes pueden generar cáncer de mama.
Realidad: Para mayor tranquilidad con respecto a los métodos anti conceptivos consulta con tu médico de familia médico de familia, así seleccionarás el método anticonceptivo más apropiado para ti. Con respecto a los desodorantes no hay estudios que evidencien que sus componentes o la disminución de la transpiración aumenten el riesgo de cáncer de mama.

Mito: Los aumentos de seno con silicona incrementan el riesgo de contraer la enfermedad.
Realidad: Aunque hubo un tiempo de controversia alrededor de este tema, posteriores investigaciones dieron al traste con este mito. Ver