Recuerda que la alimentación previa al ejercicio debe cumplir con dos condiciones básicas, proporcionar la suficiente energía y ser de fácil digestión. Ten presente:

La función de los alimentos en esta etapa es ayudarle al cuerpo a recuperarse para evitar la fatiga y el agotamiento físico. Ten presente:

Es ideal comer 30 minutos después.

Incluye proteínas para ayudar a reparar el tejido muscular y tener una mejor recuperación física.

Toma una comida liviana, que incluya carbohidratos como arroz, papa, plátano, pastas, frutas, verduras y proteína como carne, pollo, pescado o atún.

Mantén el consumo de agua. Un indicador de hidratación es el color de la orina, si es clara significa que tomaste suficiente cantidad, si es muy amarilla, es señal que aun hace falta consumir más.

Recuerda el descanso y dormir bien como parte integral de la actividad física.